La motricidad fina en la Guarderia

En la etapa de Educación Infantil, trabajar la motricidad fina es muy importante, puesto que, potencia habilidades manuales necesarias.

La motricidad fina hace referencia a los movimientos voluntarios muy precisos de las manos, pies y dedos, que implican pequeños grupos de músculos y que requieren una mayor coordinación. Comprende todas aquellas actividades realizadas por los niños que necesitan una precisión, un alto nivel de coordinación visio-manual, una fuerza controlada y una buena concentración; es decir, que se trabajan los movimientos con precisión realizadas por la mano, los dedos, la muñeca, el antebrazo y el brazo.


En la etapa de Educación Infantil, trabajar la motricidad fina es muy importante, puesto que, potencia las habilidades manuales necesarias para la escritura y, especialmente, para hacer la pinza. A pesar de trabajar este aspecto, hay niños que por la tonicidad de sus dedos muestran dificultades en la hora de coger el lápiz.

Nuestro objetivo a lo largo de toda la etapa de Infantil es favorecer muchas actividades que trabajen el dominio de la mano, la destreza, la tonicidad de los dedos, la precisión, la fuerza y la presión realizadas con las manos y los dedos, así como también potenciar la coordinación óculo-manual, respetando lógicamente que cada niño tiene su propio ritmo de aprendizaje y madurez.

Experimentar con las manos y usarlas por varias cosas es la forma con que se desarrolla la motricidad fina. Es por este motivo que las tareas del día a día, el juego y las manualidades o la expresión plástica resultan las actividades por excelencia en la hora de estimular las habilidades motrices.

Competencia global
Noticia